¡Señora! Quiero una monedita!

En realidad casi nunca retiro dinero de un cajero automático en la calle, pero hoy necesitaba dinero en efectivo. Estaba a punto de retirar el dinero y de repente un indigente estaba gritando en mi oreja. ¡Señora! ¡Quiero una monedita! Esto no va a funcionar, no puedo hacer dos cosas al mismo tiempo. Además el sol brillaba en la pantalla por lo que no podía ver casi nada. Tampoco se me sentía bien que tenía el monedero en mi mano mientras el hombre estaba a mi lado. Dejé de retirar el dinero y fui a una tienda

Segundo intento, ni rastro del indigente, esta vez debería tener éxito. Como es posible, no lo sé, pero al instante el mismo tío quería otra vez una monedita Mi respuesta fue: NO Y LARGATE YA. El hombre seguía gritando a mi lado diciendo que quería una monedita. Pensaba, !Basta ya!, ¡Dejáme en paz!, siempre esta mierda sobre una monedita! Ni siquiera yo pregunto a la gente en la calle por una monedita, una manera muy fácil para ganar dinero.

 “Porqué necesitas dinero?” me gustaría saber. “Soy un indigente y estoy incapacitado anímicamente para trabajar Señora.”En realidad no estaba convencida. Subsidio de la Seguridad Social? Mientras tanto la gente estaba viendo a una distancia, con la pregunta: Cómo acabará esto?

De repente se me ocurrió una idea para preguntar una monedita. “Señor tienes una monedita para mi? Dos euros por favor porque tengo autismo, seguramente vale la pena. Esta pregunta nunca había tenido antes. De golpe yo cambiaba de “una señora” en una puta de mierda, golfa, zorra ,… Gritaba “No te doy una monedita!”

Entonces eso quedo claro. Hay gente que pregunta por dinero y hay gente que da el dinero. Es imposible para cambiar esa papel.